En Estados Unidos hay muchos niños que sufren de obesidad. Este número supera los 3 millones de casos de obesidad infantil por año. La obesidad del niño es muy grave para su salud, ya que puede causar presión arterial alta, colesterol alto y diabetes. Sufren de confianza en sí mismos y pueden caer en depresión.
Obesidad infantil: nadie dijo que el cambio fuera fácil
Estados Unidos sufre una epidemia con estos múltiples casos de obesidad, y la parte triste es que es muy tratable sin la intervención de un médico. Los padres deben estar más atentos a la salud de sus hijos y ayudarlos a cambiar. Tienen que decidir qué es bueno y qué no es para ellos.
La obesidad proviene de las siguientes causas: metabolismo, nutrición, falta de ejercicio o genética. Si padece esta enfermedad debido a la genética, puede cambiar su dieta y hacer muchos ejercicios de acondicionamiento físico. La tarea más importante es controlar muy bien los hábitos alimenticios de los niños. En segundo lugar, se recomienda controlar el tiempo del niño cuando está demasiado delante del monitor. Tienes que llevarlo afuera para jugar con él, quemar calorías, etc. Es fácil limitar el tiempo de pantalla, usando tecnología móvil y poco esfuerzo por parte de los padres.
¿Cómo se puede tratar la obesidad infantil sin acudir a un médico especialista?
Para deshacerse de la obesidad, necesita un plan de nutrición saludable. El primer consejo es comer sano, ya que los niños copian los gestos de sus padres. Los padres deben ser un ejemplo para ellos. El segundo consejo es intentar usar aplicaciones móviles gratuitas, ya que te ayudarán a rastrear tu quema de calorías. Además de quemar calorías, estas aplicaciones pueden enseñarle qué ejercicios físicos le serán útiles. El cambio no ocurrirá de la noche a la mañana, por lo que necesita paciencia para ver los resultados. Si el padre tiene un estilo de vida saludable, es mucho más probable que los niños hagan lo mismo.
La mayoría de las personas se quejan de que una alimentación saludable es demasiado cara. De hecho, el consumo saludable es más costoso, pero será útil para la longevidad de la vida.
Comer una comida sana y equilibrada no debería costar más de diez (10) dólares al día, si lo hace correctamente. Tenga en cuenta que un 95% de dieta y un 5% de ejercicio logran un peso saludable.